Ocho muertes violentas en cárceles nacionales, desde el penal de Morros Blancos a las de máxima seguridad, han puesto en la mira el desempeño de Régimen Penitenciario y la Policía, pero también de la sostenibilidad del modelo carcelario del país. Para intentar remediarlo, las autoridades pusieron en marcha un plan que va desde un nuevo sistema de rotación hasta la intensificación de requisas a los privados de libertad y “mano dura” en la baja de funcionarios.
Los informes de la Defensoría del Pueblo y Derechos Humanos apuntan a los problemas recurrentes de hacinamiento y retardación de justicia. Para el Gobierno la violencia es resultado de que se haya masificado la población carcelaria proveniente de bandas extranjeras.
Informe
El 2 de enero se reportó la muerte en el penal de Morros Blancos (Tarija) de un privado de libertad de 35 años que había sido apuñalado durante una pelea en un festejo de Año Nuevo, lo hirieron repetidamente en el abdomen. Lo llevaron a Emergencias, pero no pudo sobrevivir.
El 3 de enero hubo dos asesinatos, ambos a puñaladas. El primero fue en el penal de máxima seguridad de Chonchocoro, La Paz, y el segundo en el Centro de Readaptación Productiva Montero (Cerprom) en Santa Cruz.
Más adelante, el 12 de enero en Palmasola se registró un feminicidio seguido de suicidio. Una mujer fue a visitar a su ex pareja, quien la estranguló y luego se ahorcó en su celda.
El 26 de enero nuevamente Chonchocoro fue escenario de una muerte, un privado de libertad mató a balazos a otro.
Y este 3 de febrero en ese mismo recinto murieron apuñalados otros dos internos.
Máxima seguridad
El Centro Penitenciario de San Pedro de Chonchocoro está ubicada en el municipio paceño de Viacha, tiene unos 700 presos y está calificada como una de las de máxima seguridad en el país. Los hechos pusieron en entredicho esa calificación.
Una requisa ejecutada por 400 policías el martes en la tarde derivó en el decomiso de decenas de cuchillos de cocina, alcohol, droga, celulares y televisores plasma. Todo esto ingresó a pesar de que este recinto ya tiene un scanner corporal.
Más de 31 mil reclusos en todo el país: En 2024, el régimen penitenciario registraba 31.105 privados de libertad. La cifra refleja un incremento de más de 13.000 reclusos en tan solo dos años.
Para la Defensoría el asesinato por arma de fuego “marca un hito negativo en temas de seguridad al interior de las cárceles, que puede generar mayor violencia si no se toman medidas contundentes y oportunas”.
El director de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, respondió atribuyendo parte del problema a que se incrementó la cantidad de presos involucrados con bandas de crimen internacional.
Esta institución también llama a la acción con el argumento de que hasta la primera semana de febrero ya hubo ocho muertes, mientras que a lo largo de todo el 2024 fueron nueve.
“Mano dura”
El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, hará “todos los esfuerzos para sancionar de forma ejemplar a los malos funcionarios que manchan el uniforme verde olivo”, anunció procesos disciplinarios a todos los policías que puedan estar involucrados como cómplices en esas muertes.
Hace un par de días anunció en sus redes la baja definitiva del policía sospechoso de vender un arma al interno de Chonchocoro para que mate a otro reo. Aunque él alega ser inocente.
Siguiendo esa política, las autoridades Penitenciarias y de la Policía ordenaron el cambio de personal en las cárceles, empezando por Chonchocoro. Paralelamente, el Ministerio demanda la agilización de leyes en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP): la del indulto y la de las tobilleras para descongestionar cárceles.
Operativos en Tarija
El comandante departamental, coronel Ángel Morales, confirmó que se designó al teniente coronel Patrick Saavedra como nuevo jefe de seguridad, por una disposición nacional que también ordena el cambio de personal en Yacuiba, Bermejo y Villa Montes.
“Se va a hacer rotar a todo el personal porque tenemos que asumir que si se trabaja mucho tiempo puede llegar a haber hasta una familiaridad. Estamos trabajando para evitar eso”.
Adelantó un mayor trabajo de inteligencia, como la última requisa del miércoles en el pabellón de máxima seguridad en la que incautaron artículos prohibidos y detectaron el ingreso de droga que era lanzada hacia las ventanas.
Se hará hincapié en esta área, donde a fines de 2024 murió quemado un interno al que quemaron con gasolina.
Via: El País
