El parque Valle del Sol de Mallasa -que se encuentra en la zona Sur de la ciudad de La Paz- ya no tiene jardines, las piscinas para niños y adultos fueron cerradas y con el paso del tiempo quedaron deterioradas. La suciedad tomó la laguna, los paseos peatonales se cubrieron de tierra y barro, además las cubiertas de los parrilleros y los juegos infantiles registran una serie de daños por el olvido y el abandono.
Este parque fue inaugurado en 2004 por Juan del Granado, quien recibió el apodo de “alcalde jardinero”. Este espacio se construyó sobre una superficie de 80.000 metros cuadrados frente al zoológico Vesty Pakos. La página web de la Empresa Municipal de Áreas Verdes (Emaverde) detalla que “el 70% de la superficie del parque está constituida por áreas verdes con sistema de riego por aspersión. Entre los árboles destacan acacias, eucaliptos, pinos y vegetación alta con manchas de flores”.
De toda esa descripción ya no queda casi ninguna área verde. Página Siete intentó obtener una respuesta de la Alcaldía de La Paz desde hace más de 10 días y personal del área de comunicación respondió que Emaverde no contaba con un gerente.
¿Qué ocurrió con el parque Valle del Sol? Un funcionario de la entidad, que pidió no dar a conocer su nombre, explicó que el principal problema de este espacio, junto con el zoológico, es la provisión de agua.
“El costo del agua es el mismo que se paga por el de servicio público y viene a ser el triple de lo que un ciudadano cancela por su casa. Por tanto, el mayor deterioro del parque Valle del Sol como del zoológico son los jardines. Hay un proyecto de recolectar agua del río La Paz, que se encuentra por la Muela del Diablo, y permita regar el Vesty Pakos y el Valle del Sol, pero nunca se ejecutó”, afirmó el funcionario.
La página de internet de Emaverde detalla que este espacio es un área de recreación familiar. “Tiene dos piscinas, una de 50 metros cuadrados y otra de 300 metros, con baños, duchas y vestidores. Hay 11 pahuichis con parrilleros y varios otros parrilleros, vías asfaltadas, cinco canchas de futsal, una boletería y tres áreas de juegos diferenciadas por edades”.
Hoy, la realidad contradice esa descripción. En la actualidad, las piscinas para niños y adultos están en completo abandono y deterioradas. Los vestidores están cerrados con candados y el Pahuichi que está en este sector se inclinó y está a punto de desplomarse. Y cuando llueve, en las piscinas de niños sólo queda tierra y barro.
Las cerámicas de algunos parrilleros saltaron, algunos tramos de las vías asfaltadas se cubrieron con tierra y barro. Además, algunos de los árboles tienen las cortezas desprendidas como señal de enfermedad.
La laguna se llenó de basura y el agua, antes cristalina, ahora es turbia. Los juegos infantiles se fueron deteriorando. Luego de una lluvia, para los visitantes es complicado subir a uno de esos juegos por el barro. Y el “trencito” que circulaba con niños por todo el espacio recreativo desapareció.
“El segundo deterioro importante es la infraestructura de juegos”, agregó el funcionario. Explicó que desde 2012 la Alcaldía optó por la política de que Emaverde se haga cargo del mantenimiento de los parques infantiles, pero los ingresos no cubren esta necesidad. La empresa municipal contrató un seguro que sólo cubre los daños causados por terceros, pero no el deterioro por el uso.
“Eso quiere decir que si se desea un mejor mantenimiento, el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz debería invertir en el parque. Lo que hace Emaverde con las recaudaciones es mantener el espacio lo mejor que puede, porque la mayoría de los recursos se van en pago de servicios y el salario de los trabajadores”, precisó.
Un extrabajador de Emaverde recordó que la última intervención que se realizó en el parque Valle del Sol fue el 31 de agosto pasado. El alcalde Iván Arias y el embajador de India en Perú, concurrente en Bolivia, Mandarapu Subbarayuduse, develaron el busto de bronce de Mahatma Gandhi en el ingreso al lugar.
En su discurso Arias dijo: “Es una zona muy concurrida por los paceños los fines de semana. Aquí venimos a tener un momento de esparcimiento, de paz y tranquilidad. Por eso, miles de personas cada fin de semana podrán ver este busto y conocer sobre la personalidad e historia de Mahatma Gandhi”. “Cada fin de semana, en este lugar, se van a realizar actos de la cultura, de la música, de la comida y tradiciones de la India para que la gente conozca más sobre aspectos de ese país”, anunció.
Página Siete
